miércoles, 9 de septiembre de 2015

Pintadas y limpieza




La verdad es que espero cosas nuevas y positivas del nuevo ayuntamiento. Creo, por otra parte, que resulta difícil hacerlas cuando los presupuestos se encuentran mermados. Ahora bien hay cosas que no necesitan grandes cantidades de dinero y podemos cambiar la imagen de nuestra ciudad, siempre en sentido positivo. La verdad sea dicha que los cambios hechos hasta el momento han sido mas bien efectistas y en algún caso discutibles. Siempre que haya receptividad para poder rectificar las cosas irán hacia delante. Como vecino del Casco Histórico recorro con mucha frecuencia sus calles y debo decir que hay núcleos que dan una imagen muy deteriorada de la ciudad. En las décadas pasadas se invirtió mucho y ha habido resultados sorprendentes, pero en los últimos años por dejadez, aburrimiento o incivismo de alguno de sus habitantes han hecho retroceder esta imagen positiva que se iba forjando. Las imágenes que adjunto dan fe de ello. La puerta lateral de la iglesia de la Magdalena (Patrimonio de la Humanidad) toda llena de pintadas, justo al lado de esta joya mudéjar un mural en el que nos indican que no hay que comer pollo (¿), con un colorido que no entona con el conjunto, observo mucha sensibilidad contra el maltrato animal pero poca hacia el patrimonio cultural, ¿es posible tanto desequilibrio?  Si hablamos de animales, muchas calles escondidas del casco donde lo vehículos apenas pasan son el lugar elegido por sus dueños para que sus mascotas depositen sus heces y orina. Lo malo es que las heces se pueden recoger pero la orina no. El pavimento queda todo sucio e impresentable. Creo que estamos en un mundo de locos, estamos perdiendo el norte, el sur y… Es necesario que el propio ayuntamiento se erija en pedagogo para enseñarnos a todos como debemos comportarnos para tener una ciudad limpia que es sinónimo de higiene y de cultura.

Todo no es problema de mascotas, también no somos capaces de darnos cuenta que farolas, señales de tráfico, etc. no son los lugares adecuados para poner carteles o pegatinas. Hoy día tenemos las redes sociales que nos permiten comunicarnos con mayor eficacia y limpieza que con estos modelos que ensucian el  mobiliario urbano. Pediría al Ayuntamiento que busque soluciones a estos problemas cotidianos y que tanto afean a nuestra ciudad. “No hay ética sin estética”.